23 años de cárcel por intentar matar a su hermana y a su cuñado
Antonio Gregorio V. V. recibió sentencia condenatoria con pena agravada de 23 años de privación de libertad, como autor del delito de asesinato en grado de tentativa contra su hermana y su cuñado.
Fiscalía demostró con testimonios anticipados, testimonio de la perita médico-legal y otras pruebas, que la madrugada del 18 de junio de 2017, Antonio Gregorio V. V. llegó al domicilio de su hermana y cuñado, armado con un machete. Interrumpió el descanso de la pareja con el grito “¡así les quería coger!”, los atacó: el primer machetazo cayó en el rostro de la mujer que estaba embarazada.
El hijo adolescente de la pareja, al escuchar los gritos de auxilio de sus padres, tomó una tabla y golpeó a su tío en la espalda. Pero este también agredió a su sobrino en el rostro y huyó.
Cuando la pareja encontró el interruptor y encendió la luz, lo que creyó que era golpes en sus cuerpos, cabezas y rostros, resultaron ser cortes de machete. Supieron que el autor fue Antonio Gregorio V. V. por el insultante grito que dio antes del intento de asesinato.
Como consecuencia del ataque, la mujer perdió a su bebé de ocho meses de gestación, tiene cicatrices en su rostro y extremidades, perdió tres dedos y la movilidad de los otros en ambas manos (calificada como incapacidad del 15%). En tanto que su esposo quedó con una discapacidad de 42%.
Días antes de este ataque, la mujer puso una denuncia en contra de su hermano por haber intentado violar a su hija de 13 años, por lo que “Fiscalía le puso 72 horas para desalojar el hogar, porque había vivido con nosotros por un año y medio”, dijo en su testimonio anticipado.
El 5 de septiembre de 2018, en un control de rutina, la Policía ejecutó la boleta de localización y captura de Antonio Gregorio V. V., en el sector de Moraspungo, en La Mana, provincia de Cotopaxi. El sentenciado, de 36 años, se acogió a su derecho constitucional del silencio.
El Tribunal Penal, en su resolución, concluyó que Antonio Gregorio V. V. “por la denuncia de su hermana y su cuñado ante la Fiscalía, por la agresión sexual ejecutada tiempo atrás en su sobrina, descargó su desenfrenada ira asestando machetazos en primera instancia a su hermana […] llevaba un solo propósito, dar muerte a su hermana y su cuñado […], el resultado no se consumó por la oportuna intervención del hijo de la pareja”, precisa el fallo.
La reparación integral se fijó en 10.000 dólares para las dos víctimas y una multa de 800 salarios básicos unificados a favor del Consejo de la Judicatura de Orellana.