Rodrigo ha depositado este miércoles el montante de su cláusula de rescisión, que asciende a 70 millones, en la sede la de LaLiga. De esta forma, el centrocampista de 23 años, que fichó por el Atlético el verano pasado, saldrá del club y pondrá rumbo a Manchester, donde se enrolará en las filas del City de Guardiola.

La insistencia y el convencimiento tanto de Guardiola como de Txiki Begiristain, director deportivo del campeón inglés, de que es el jugador que necesitan ha sido clave en la marcha de Rodrigo, que regresó el curso pasado al Atlético previo pago de 25 millones de euros al Villarreal. Con el brasileño Fernandinho (34 años) en la recta final de su carrera, Rodrigo es el eje sobre la que Guardiola pretende que gire el City a partir del próximo curso.

Simeone trató de convencer al mediocentro de que permaneciera en el Atlético y recalcó a la directiva que el chico era fundamental en su nuevo proyecto. El técnico jugó sus bazas desde el discurso del jugador que fue. Le aventuró y le desafió a asumir el liderazgo del equipo en el campo con Thomas de acompañante. La pareja que ya no podrá consolidar Simeone formaba parte del plan de reconstrucción al que se ve abocado el Atlético ante la desbandada masiva de jugadores por la que atraviesa.

Una vez conocido el deseo de Rodrigo de salir y emprender una nueva aventura en el Manchester City, el Atlético se movió en busca de un sustituto y cerró el fichaje de Marcos Llorente, procedente del Real Madrid. Los rojiblancos pagaron cerca de 40 millones por el centrocampista de 24 años, que firmó para las próximas cinco temporadas.

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