Muere Koldo Aguirre, santo y seña del Athletic durante décadas
Koldo Aguirre Bidaurrazaga, excapitán y exentrenador del Athletic, y en esta última faceta, también del Hércules y el Valencia, falleció en Bilbao a los 80 años, después de unos últimos meses en los que la salud apenas le permitía salir de casa. Natural de Sondika, su primer equipo federado fue el Getxo. Empezó con 15 años y jugó muy poco en los juveniles, porque debutó a los 16 años en Tercera División. El Getxo pagaba una multa cada jornada porque no se podía jugar con esa edad.
Aquel equipo era un gran escaparate. Era casi el filial del Athletic. Acudieron enseguida a verle y ni siquiera pasó una prueba. Le ofrecieron fichar por el club rojiblanco y dijo que sí. Estudiaba entonces contabilidad en una academia y trabajaba con un tío suyo que era fontanero. El fútbol lo cambió todo. Su primer sueldo fue de 5.000 pesetas al mes y una ficha de 70.000. Eso durante dos años; después, tres años más de contrato con otra ficha. Con 19 años ya ganó la Copa, entonces llamada del Generalísimo. Fue en la final de los “once aldeanos”, frente al Real Madrid, los galácticos de la época, campeones de Europa y en el Santiago Bernabéu. El Athletic ganó 2-0. De aquella final, Koldo Aguirre era el más joven. “Piru Gainza casi me doblaba. Los directivos se acercaban a mí y me decían: ‘Tranquilo chaval’, y yo que estaba tranquilo me empecé a poner nervioso, así que me levanté y fui donde Albeniz, el entrenador, a decirle: ‘Dígales por favor a todos estos que se marchen porque me están poniendo malo’ y les mandó salir del vestuario”, recordaba hace unos años en una entrevista.
Aguirre había debutado en la Liga frente al Zaragoza. “Perdimos 2-1, pero fue una felicidad. A mí no me quitaba nadie jugar en el Athletic. Con los años, Koldo Aguirre llegó a capitán del Athletic. Lo fue en una eliminatoria contra el Liverpool. “Hicimos el mismo resultado que en Bilbao y en la prórroga no hubo goles. No había desempate ni se tiraban penalties. Nos los jugamos a cara y cruz en Anfield. Yo no sabía inglés. Bajó el presidente Javier Prado y hablaron. Le pregunté a ver lo que había elegido y me dijo que azul. El árbitro tiró la moneda y salió rojo. Pensé: adiós, hemos perdido, pero no. Habían hablado que la primera vez se tiraba para tener la preferencia de elegir color. Eligió el capitán del Liverpool. Salió nuestro color. Todos los compañeros se enteraron de que habíamos ganado por el salto que di”.
Sin embargo, como jugador también se le recuerda por un partido frente al Espanyol en Sarriá, en la temporada 1965/66. El Athletic perdía 3-0 en el minuto 71, cuando Aguirre decidió desobedecer las órdenes de su entrenador, Piru Gainza. Dejó su puesto en la banda, se desplazó al centro y le marcó cuatro goles a su amigo Carmelo para la victoria rojiblanca. Al acabar el partido, tras salir del vestuario, Koldo y Carmelo se pararon a hablar. El portero estaba con su hijo, Andoni Cedrún, que se negó a darle un beso a Koldo, –al que llamaba tío, por los goles que le había metido a su padre.
Aguirre se fue del Athletic por una cuestión personal. Ronnie Allen quería que se quedase, pero le dieron la noticia de que su hermano, que jugaba de portero en el Real Madrid amateur, tenía leucemia y se iba a morir. “Sólo lo sabía yo. Ni mi madre ni mi hermana estaban enteradas. Quería evadirme y me fui al Sabadell. Me sirvió de poco porque me fui en verano y murió en octubre. Aquello era otro mundo”.
Como entrenador dirigió media temporada al Erandio y luego al Villosa y el Alavés. Sacó el título nacional en 1975. Empezó en Lezama, con los infantiles. “Cuando me dijeron que iba a entrenar al Athletic no lo esperaba. Querían fichar a un inglés pero Piru Gainza le dijo a Eguidazu: ‘tenemos aquí a Koldo, con todas las garantías’”. En su primera temporada fueron terceros en la Liga y subcampeones de la UEFA ante la Juventus, y de la primera Copa del Rey tras la muerte de Franco. “En la final de Copa, cuando llegamos a los penalties le dije a un directivo: ‘Ya hemos perdido. Este tiene una suerte de la leche’, porque enfrente estaba Rafa Iriondo, que era un suertudo. Nos pesó salir de favoritos”.
Después entrenó al Hércules. Estuvo tres años. Luego llegó el Valencia. Colaboró indirectamente al título de Liga que ganó el Athletic en la temporada 1982-83, gracias a un gol de Tendillo que tumbó al Real Madrid: “Era una jugada que habíamos ensayado mil veces y no salió nunca. Sólo aquel día. Creo sinceramente que por aquello me merecía haber dado un paseíto en la Gabarra, pero al menos me llevaron a hombros desde el campo hasta el hotel, porque con esa victoria nos salvamos del descenso”.
Después de dejar los banquillos, Koldo Aguirre siguió ligado al Athletic. En los últimos años, como embajador con las peñas repartidas por toda España, hasta que los achaques le retiraron hace un par de años. Este miércoles, el Athletic ha anunciado su fallecimiento.
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