Rodrygo Goes, el último mirlo blanco
El fichaje de Rodrygo Goes (Osasco, São Paulo; 18 años) por el Real Madrid se concretó “en 20 minutos”. Lo reconoció el propio jugador este martes, durante su presentación en el Santiago Bernabéu. “De pequeño, le decía a mi padre (Eric Goes, también futbolista hasta 2016) que jugaría en el Madrid. Y cuando me enteré que estaban detrás no lo dudé”, dijo.
Florentino Pérez y José Ángel Sánchez, presidente y director general, tomaron en consideración los informes enviados por Juni Calafat, jefe de captación internacional del Madrid, y especializado en el fútbol brasileño, en los que recomendaba la contratación de Vinicius Jr. y Rodrygo, dos promesas emergentes del Flamengo y el Santos. En aquel momento, verano de 2018, el Madrid se recuperaba de la inesperada marcha de Zinedine Zidane, y confiaba en la gestión de Julen Lopetegui para dirigir una plantilla tricampeona de Europa, que en opinión de los gestores no requería de una mayúscula reconversión. Tampoco cuando al adiós de Zizou se sumó después el de Cristiano Ronaldo.
Para la presentación de Rodrygo, Florentino Pérez repescó un discurso que hoy ha sido reemplazado. “Nuestra estrategia es la búsqueda del talento emergente. Creemos en ello, y eso pasa por incorporar a jóvenes con un presente y un futuro extraordinarios. Hoy llega uno de estos jóvenes prodigios, un futbolista que ya genera admiración en Brasil, donde el fútbol es una filosofía de vida”, aseguró, antes de que el jugador se vistiese de corto.
Si Vinicius, un año mayor que su compatriota, aterrizó en el equipo como remiendo, la llegada de Rodrygo se produce en un momento en el que la inmediatez por la conquista de títulos tras un año para el olvido ha limitado ese terreno de probatura idóneo para un futbolista de su edad. “Vinicius me ha contado su experiencia. Hay que tener paciencia, soy muy joven, tengo un futuro enorme por delante y las cosas van a salir de forma natural”, se liberó el jugador. “Estoy a disposición del club tanto para jugar en el primer equipo como en el Castilla”, aseguró después.
Si bien los fichajes de Militão (21), Jovic (21) y Mendy (24), refuerza la idea de adquisición de futbolistas emergentes, los tres cuentan con cierta experiencia en Europa. Una estrategia que subió de nivel con el fichaje de Hazard (28), tótem del cambio de paradigna en la remodelación de un Madrid necesitado de estrellas. Los trabajos por incorporar a Pogba o Eriksen para el centro del campo, o a Mbappé o Neymar en ataque, recortan aún más el espacio para apuestas de futuro.
“Soy un delantero rápido, con gol y dribling. Soy brasileño y muchos jugadores tienen estas características. Robinho y Neymar son dos jugadores con los que me identifico”, se describió. “Vinicius y yo somos dos futbolistas con las mismas características, pero no hay que hacer comparaciones”, dijo después. Ambos representan una estirpe de jugadores que hoy se han alejado del radar blanco.
Puedes seguir Deportes de EL PAÍS en Facebook, Twitter o suscribirte aquí a la Newsletter.