Los estudiantes lideran la protesta global contra el cambio climático en vísperas de la cumbre de la ONU

Menos discursos y más acción para detener el calentamiento global. Si durante los últimos días la ONU ha reiterado este mensaje a los líderes mundiales que se reunirán el próximo lunes en la Cumbre del Clima en Nueva York, este viernes cientos de miles de estudiantes se lo gritarán desde las calles. Decenas de miles lo han hecho ya en Australia y otros países del Pacífico, en el arranque de una huelga escolar global para exigir medidas urgentes para detener la catástrofe medioambiental. De Sídney a São Paulo, pasando por Berlín, Bruselas o México, los alumnos cerrarán sus cuadernos y participarán en las protestas, que se prevén multitudinarias en ciudades como Nueva York, donde se espera la participación de más de un millón de personas. Al frente de esta marcha estará la activista sueca de 16 años Greta Thunberg, impulsora del movimiento Fridays for Future. En total están programados más de 5.000 actos en 156 países a lo largo de la semana que tendrá su colofón el próximo viernes 27 en una huelga climática mundial a la que esta vez no se sumarán solo los estudiantes: la protesta está respaldada por miles de asociaciones de la sociedad civil.

«Dejad de negar que la Tierra se está muriendo», decía un cartel que llevaba un estudiante que protestaba en Sídney, mientras la mayoría de redes sociales muestran a estudiantes reunidos en todo el país, entre otras en varias capitales de Estados y pueblos del interior como Alice Springs.

Canoas y escudos en las islas Salomón

Los países insulares del Pacífico, los más vulnerables al aumento del nivel de las aguas a raíz del calentamiento global, también han participado en la protesta.

Los escolares en las islas Salomón, algunos armados con escudos y

banderas y otros en canoas, se congregaron cerca del mar para pedir acciones para mitigar la emergencia climática.

Mientras los escolares de Kiribati (país insular al noreste de Australia) coreaban, con el puño en alto,

«no nos estamos ahogando, estamos luchando».

«No lo empezamos, pero estamos tratando de combatirlo», rezaba otra pancarta en la manifestación de Sídney.

Protestas similares, inspiradas por la activista sueca de 16 años Greta Thunberg, están previstas en todo el mundo este viernes, con el objetivo de que los estudiantes y otras personas hablen con una sola voz sobre los efectos del cambio climático en el planeta, que no son cosa del futuro, sino del presente.

El Acuerdo de París cerrado en 2015 para contener el aumento de temperatura en dos grados con respecto a los niveles preindustriales no ha impedido que las emisiones y las temperaturas estén hoy en niveles récord y que los fenómenos meteorológicos extremos como el huracán Dorian sean cada vez más frecuentes. “Hay que hacer comprender a la gente que hay una emergencia climática hoy, que el problema del cambio climático es de hoy, que la salud pública está amenazada hoy, que el mar está subiendo hoy, que las temperaturas ya están provocando problemas muy graves”, enfatizaba esta semana el secretario general de la ONU, António Guterres, en una entrevista realizada por EL PAÍS con Covering Climate Now, un consorcio global de más de 250 Medios de comunicación para fortalecer la cobertura informativa sobre la lucha contra el cambio climático que tiene su próxima parada en la cumbre de la ONU del lunes. La Organización de Naciones Unidas reúne ese día a líderes mundiales para discutir estrategias de mitigación del cambio climático, como la transición a fuentes de energía renovables a partir de combustibles fósiles.

El ministro de Finanzas de Australia, Mathias Cormann, señaló este jueves al Parlamento que los estudiantes no deberían participar en el movimiento de protesta. «Los estudiantes deben ir a la escuela», afirmó. En Nueva York, en cambio, 1,1 millones de estudiantes de escuelas públicas tienen permiso para faltar a las clases.

Las movilizaciones para exigir medidas contra el cambio climático se extenderán hasta el 27 de septiembre, coincidiendo con la celebración en Nueva York de la cumbre convocada por Naciones Unidas para impulsar la ambición en las negociaciones de la próxima Conferencia del Clima que se celebrará a final de año en Chile.

La campaña va camino de convertirse en la mayor movilización climática de la historia y Fridays for Future ya cuenta con una lista de más de 5.225 eventos en 156 países que tendrán lugar del 20 al 27de septiembre, y cada día se añaden más.Los adultos se unirán a los jóvenes y, de hecho, la plataforma 350.org estima que más de 73 sindicatos, 820 organizaciones y2.500 empresas ya han manifestado su apoyo a las huelgas. Hasta 6.323páginas de Internet realizarán una huelga climática digital.

En España, la huelga, respaldada por Alianza por el Clima, tiene el apoyo de más de 300 organizaciones y Fridays For Future ha convocado 179 huelgas en todo el país. La activista de Fridays for Future María Laín, que participará en la cumbre de jóvenes que se celebrará en Nueva York este sábado ha destacado que la Cumbre Climática para Jóvenes será «un momento histórico» en el quecientos de jóvenes de todo el mundo se reunirán para buscar soluciones a la crisis climática y exigir a los políticos que actúen.

«Los jóvenes sabemos que España será uno de los países europeos más afectados por esta crisis y por eso nos hemos manifestado a lo largode todo el año. La huelga mundial del 27 de septiembre será el punto culminante de nuestras protestas, y me gustaría que tanto jóvenes como mayores se unieran a nuestra causa. Seas quien seas, la crisis climática te afecta y tú eres parte de la solución», ha reclamado.

En concreto, desde la organización Juventud por el Clima han señalado que durante toda la semana habrá distintas acciones en todo el país desde talleres, pancartas, puntos informativos, entre otras actividades. A los jóvenes se han sumado también Madres por el Clima cuyo objetivo es concienciarsobre la crisis climática y seguir ejerciendo presión para que se tomen medidas contundentes para proteger al planeta.

En el Reino Unido, la Confederación Sindical Internacional ha pedido a sus cinco millones de miembros que apoyen las huelgas, lo mismo que el sindicato irlandés Forsa, con 80.000 miembros. Mientras, en Italia, el mayor sindicato, la CGIL, con más de cinco millones de afiliados, celebrará asambleas en los lugares de trabajo el próximo 27 de septiembre.