Detienen a uno de los presuntos responsables de la matanza de Garibaldi en Ciudad de México

El fiscal de Ciudad de México, Edmundo Garrido, ha informado este jueves de la detención de uno de los presuntos responsables de la matanza de plaza Garibaldi. El 14 de septiembre, tres pistoleros atacaron a balazos un bar en la famosa plaza, uno de los puntos turísticos más importantes del centro de la capital. Seis personas murieron por las balas y otras tantas resultaron heridas. A mes y medio del ataque, esta es la primera detención por lo ocurrido.

Garrido ha identificado al detenido como Luis Fernando «N», alias El Rata. Él sería uno de los autores materiales del atentado, que tuvo lugar la noche del viernes 14 de septiembre, con la plaza Garibaldi atestada de gente y mariachis cantando por todos lados. Desde el principio, las autoridades explicaron que el ataque es una de tantas batallas de una guerra entre dos grupos delictivos antagónicos, que estarían disputándose el control del tráfico de drogas en distintas zonas de la ciudad.

Según las explicaciones del fiscal, «uno de los testigos manifestó que el día de los hechos observó cuando dos individuos vestidos de mariachi salieron de un domicilio ubicado en la calle Paraguay, en la colonia Centro, y minutos después tuvo conocimiento del múltiple homicidio cometido por sujetos cuya característica principal era la vestimenta«. Sin decirlo directamente, Garrido sugiere que estos dos mariachis eran en realidad dos de los tres asesinos disfrazados. Uno de ellos sería El Rata.

Gracias a las cámaras de vigilancia de la ciudad, la policía supo minutos después del ataque la ruta de huida de los asesinos. Aparecen, primero, corriendo, abordando tres motocicletas que esperan en una plaza aledaña a Garibaldi, segundos después de la balacera. Ahí las abordan y los seis, pistoleros y conductores, salen a toda velocidad. Luego aparecen en grabaciones de las cámaras de la avenida Eje Central, que comunica el norte de la ciudad con el sur. Y ya por último en las calles de la colonia Guerrero, kilómetro y medio al norte de Garibaldi, donde se esconden y se les pierde la pista.

Hace semana y media, EL PAÍS informaba de que los mandos de la policía supieron del escondite de los asesinos, cuatro cuadras de la colonia Guerrero,apenas 28 minutos después del ataque. Sin embargo, y pese a que en la zona había 249 agentes de policía, se escabulleron. La masiva presencia de efectivos policiales en la zona y la rapidez con que los mandos supieron del escondite arrojaron dudas sobre el acutar de las autoridades, siempre en el punto de mira por acusaciones de mala praxis y corrupción.

A mes y medio del atentado, la detención de El Rata, localizado en la otra punta de la ciudad, invita a preguntarse por la investigación, los detalles. ¿Cómo han dado con él? ¿Cómo saben que seguro es él? Y sobre todo, ¿qué hay de los otros? A día de hoy, otros dos pistoleros y los tres conductores siguen prófugos.