Los comerciantes que son parte de la Federación de organizaciones que operan en la peatonal 3 de Julio de Santo Domingo no pueden ejercer sus actividades económicas todos los días. Esta medida responde al pacto que hicieron los dirigentes del gremio con el COE cantonal, permitiendo así, el regreso de los socios a sus antiguos lugares de trabajo.

Luis Espinoza, socio del gremio, explica que se ha visto obligado a trabajar en la informalidad los días que no le está permitido abrir su local en la peatonal: “No tenemos de otra… tenemos deudas con los bancos, mercadería y facturas por pagar por pagar”, alega preocupado el comerciante.

Por lo general, los propietarios de almacenes que operan en los alrededores de la peatonal, apoyan el trabajo de los comerciantes autónomos. Pamela Ramírez es propietaria de uno de estos locales formales: “Los compañeros tienen derecho a trabajar, y mientras lo hagan de forma responsable, deberían permitirles laborar todos los días… las autoridades tienen que entender que la situación está difícil para -todos.”

Martín García, cliente en la zona, deja sus declaraciones como consumidor y como ciudadano: “No se trata de prohibir, se trata de organizar… yo también soy padre de familia y me quedé sin trabajo… ¿Qué le explicas a un hijo cuando no tienes para darle de comer?… es duro”, concluye García.

Por su parte, Víctor Baque, presidente de la Federación de Comerciantes Autónomos 3 de Julio, informa que buscan la manera de encontrar soluciones de manera responsable: “Estamos ante un enemigo invisible (coronavirus), ante que todo está la vida… no obstante, a través de la Federación, coordinaremos con las autoridades para poder laborar todos los días”, concluye. (OG)