El independentismo reclama una respuesta “masiva desde la lucha no violenta y la desobediencia civil”

A las puertas de la sentencia por el juicio al procés, el independentismo ha escenificado este martes su unidad con la presentación de un manifiesto en el que reclama a los catalanes que respondan al fallo judicial «de manera masiva desde la lucha no violenta y la desobediencia civil”. Representantes de Junts per Catalunya, Esquerra Republicana, la CUP, así como de la ANC y Òmnium Cultural han posado en los jardines de la Sedeta de Barcelona para leer un comunicado coincidiendo con el segundo aniversario del referéndum independentista del 1 de octubre de 2017, declarado ilegal por el Tribunal Constitucional. La llamada a la desobediencia masiva llega horas antes de las manifestaciones convocadas para esta tarde para conmemorar el 1-O.

El manifiesto no concreta cómo será la respuesta a la decisión del Tribunal Supremo, sino que se limita a abogar por la desobediencia civil, en la línea de la resolución aprobada en el Parlament el pasado día 26 por las tres formaciones independentistas. En el texto se defendía «la legitimidad de la desobediencia civil e institucional como instrumentos en defensa de aquellos derechos civiles, políticos y sociales que puedan ser lesionados».

“Cualquier sentencia que no sea absolutoria la consideramos injusta”, dice el manifiesto, que considera el referéndum del 1 de octubre como “el acto de soberanía más grande de la historia reciente de Cataluña y de Europa en los últimos años”. La sentencia será “el mayor ataque a nuestros derechos fundamentales”, dice el manifiesto, que califica de «falsas» las acusaciones de sedición y rebelión que formuló la Fiscalía contra los acusados durante el juicio.

«Solo se entiende desde una lógica autoritaria», consideran las organizaciones independentistas que, una vez más, han acusado al Estado de «criminalizar el derecho de autodeterminación». «No es un delito, es un hecho», dicen, al tiempo que han denunciado la «escalada represiva con la cárcel y el exilio».

Roger Torrent conmemora el 1-O con una votación simbólica ante el Parlament.
Roger Torrent conmemora el 1-O con una votación simbólica ante el Parlament.Massimiliano Minocri

Una hora antes y desde el Pati dels Tarongers, en el interior del Palau de la Generalitat, el Ejecutivo catalán, altos cargos incluidos, han acompañado al president Quim Torra y al vicepresident Pere Aragonès en la lectura de otro comunicado. En el texto han abogado por revivir el espíritu del 1-O para afrontar “los desafíos del futuro” y se han comprometido a “avanzar sin excusas hacia la república catalana». El independentismo ha reclamado una respuesta “masiva desde la lucha no violenta y la desobediencia civil” a la sentencia.

“El Govern afirma que el espíritu de ese día, de los días que precedieron al referéndum y de las jornadas que le siguieron, especialmente el del 3-O [el día de la llamada huelga de país en rechazo a las cargas policiales y al discurso de Felipe VI avalando la acción del Gobierno], es el espíritu con el que debemos encarar los desafíos del futuro y sobre todo en este camino a la república catalana, que será inevitable y que queremos construir con todos”, ha dicho Aragonès.

El president ha tenido un recuerdo para los heridos en las cargas policiales de ese día con las que el Gobierno central intentó parar la votación y que Torra ha calificado de “barbarie”. “2,3 millones de ciudadanos fueron a votar y defendieron las urnas. La sociedad catalana, como depositaria de los derechos civiles y políticos, los va a defender asumiendo todas las consecuencias, siendo golpeados y agredidos por las fuerzas enviadas por el Gobierno español”.

En el texto, los dos máximos representantes de la Generalitat se han comprometido con el “derecho a la autodeterminación, la radicalidad democrática y el diálogo”. También ha habido un recuerdo para las personas que están respondiendo judicialmente por la organización de 1-O. Algunos de los altos cargos de la Generalitat que están siendo procesados por el Juzgado de Instrucción 13 de Barcelona, que investiga los preparativos de la organización del referéndum, han ocupado lugares destacados en la segunda fila. Por ejemplo, Josep Ginesta, secretario general de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia, o Antoni Molons, secretario de Comunicación del Govern.

“Nos comprometemos a persistir hasta conseguir la libertad de los presos y las presas políticas y el retorno de las personas exiliadas”, ha dicho Torra. El president también ha insistido en su compromiso para “avanzar sin excusas hacia la república catalana». “Lo haremos de la única manera que sabemos y queremos: democráticamente y pacíficamente”, ha remachado.