Tribunal de Garantías Penales de Azuay sentenció a 29 años y 4 meses de privación de libertad a Carlos Leonidas T., por el delito de violación cometido contra su hija.

En audiencia de juicio, Fiscalía demostró que, tras la separación con su esposa, el sentenciado se quedó al cuidado de sus dos hijas y que violentó sexualmente a la menor de ellas en varias ocasiones, cuando tenía entre 10 y 12 años de edad, dentro del domicilio familiar, situado en el sector Rayoloma de Cuenca.

Mientras que la hija mayor –actualmente de 14 años– habría sido abusada sexualmente (tocamiento de sus partes íntimas) por su padre, por lo que, cansada del comportamiento de él, se fue a vivir donde una tía, a quien le contó los hechos. El 8 de junio de 2020 se denunciaron los hechos con la Policía.

El fiscal Milton Rivera sostuvo la acusación con el testimonio anticipado de la víctima, los testimonios de la hermana, del agente de Policía que detuvo al sentenciado y del médico legista que practicó el examen a la menor, en cuyo informe concluyó la existencia de lesiones, como consecuencia de las agresiones sexuales.

Los testimonios de la psicóloga y la trabajadora social que atendieron a la víctima fueron parte de la prueba de Fiscalía, así como el informe del reconocimiento de lugar de los hechos.