Novena de Navidad 2020: Séptimo día Oración
Novena de Navidad 2020: Séptimo día Oración. La Novena de Navidad comienza a rezarse el 16 de diciembre de cada año, para rezar la última al llegar al día 24, la fecha en que Jesús nacerá. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.
Cómo rezar la Novena: Novena Navidad séptimo día
(Con la señal de la cruz) En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
Benignísimo Dios de infinita caridad que nos has amado tanto y que nos diste en tu Hijo la mejor prenda de tu amor, para que, encarnado y hecho nuestro hermano en las entrañas de la Virgen, naciese en un pesebre para nuestra salud y remedio; te damos gracias por tan inmenso beneficio. En retorno, te ofrecemos, Señor, el esfuerzo sincero para hacer de este mundo tuyo y nuestro, un mundo más justo, más fiel al gran mandamiento de amarnos como hermanos. Concédenos, Señor, tu ayuda para poderlo realizar. Te pedimos que esta Navidad, fiesta de paz y alegría, sea para nuestra comunidad un estímulo, a fin de que, viviendo como hermanos, busquemos más y más los caminos de la verdad, la justicia, el amor y la paz. Amén.
Oración inicial
Señor Jesús, Tú eres amor y vida. Has querido nacer como todos nacemos, de una mujer. De esta forma has bendecido a la familia. haz que cada familia se convierta en verdadero santuario de vida y de amor. Haz que tu gracia guíe los pensamientos y las obras de los esposos, hacia el bien de sus familias. Haz que las jóvenes generaciones encuentren en la familia una fuerte de apoyo para su crecimiento en la verdad y en el amor. Haz que los niños sean esa semilla de esperanza en la familia y así, con nuestro amor, se renueve su inocencia. Haz que el amor santificado por la gracia del matrimonio, se demuestre más fuerte que cualquier debilidad y cualquier crisis. Amén.
Saludo
Queridas amigas y amigos. Hoy contemplaremos cómo Dios, en su infinito Amor, pone su confianza en una joven pareja. Con María y José, Dios abrirá para toda la humanidad caminos de esperanza y de fe, aún en medio de los mismos sufrimientos que nosotros experimentamos.
En nuestra vida: Novena Navidad séptimo día
Como en el tiempo de Jesús, también ahora, hay gente que migra de sus países buscando mejores días para su familia. También en su alma surge cantidad de interrogantes: ¿Cómo ganaremos la vida allí? ¿Nos tratarán bien? ¿Hasta cuando tendremos que estar fuera? ¡Cuánto extrañamos nuestra tierra! ¿Por qué Dios permite estas situaciones?. Lo importante es ponerse en manos del Padre y confiar plenamente en su bondad infinita
Para dialogar: Novena Navidad séptimo día
¿Tienes algún familiar en otro país? Puedes compartir su experiencia? ¿Qué enseñanza te queda para tu vida?
Texto
Están los pastores en la duermevela vigilando sus rebaños. La noche es alta y luminosa de estrellas y hace frío; ellos han encendido hogueras y se han arrebujado en sus mantas de lana. De repente todo se enciende y aparece un Ángel que les dice: “Ha nacido el Mesías: id a verlo y adorar; está más allá, en ese portal”.
Proclamación de la Palabra (Mt. 2, 13-15)
En aquella región había unos pastores que pasaban la noche en el campo, vigilando por turno sus rebaños. Un ángel del Señor se les apareció y la gloria de Dios los envolvió con su luz y se llenaron de temor. El ángel les dijo: “No teman. Les traigo una buena noticia, que causará gran alegría a todo el pueblo: hoy les ha nacido, en la ciudad de David, un salvador, que es el Mesías, el Señor. Esto les servirá de señal: encontrarán al niño envuelto en pañales y recostado en un pesebre”.
De pronto se le unió al ángel una multitud del ejército celestial, que alaba a Dios, diciendo: “¡Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a los hombres de buena voluntad!”. Cuando los ángeles los dejaron para volver al cielo, los pastores se dijeron unos a otros: “Vayamos hasta Belén, para ver eso que el Señor nos ha anunciado”.
Reflexión
Este texto nos invita a meditar cómo Jesús, María y José debieron pasar por muchos sinsabores en tierra extraña. Sin embargo, nunca perdieron su confianza en el Padre. Dios se solidariza con la humanidad, con los hombres y mujeres que se ven forzados a migrar, y con todos los que sufren de alguna manera. El séptimo día para crecer en generosidad, la cuál es la capacidad de dar con desinterés, es la virtud en la cual el amor le gana la carrera al egoísmo.
Es en la entrega generosa de nosotros mismos donde se muestra la profundidad de un amor que no se agota en las palabras. Y eso es lo que celebramos en la Navidad: el gesto sin par de un Dios que se da a sí mismo. Lo destaca San Pablo: “espero que también se distingan en generosidad… Ya conocen la generosidad de nuestro Señor Jesucristo que, siendo rico, se hizo pobre por nosotros, a fin de enriquecernos con su pobreza”.
Sabemos amar cuando sabemos compartir, sabemos amar cuando damos lo mejor de nosotros mismos en lugar de dar sólo cosas. Tomemos pues, la mejor decisión: dar cariño, afecto, ternura y perdón; dar tiempo y dar alegría y esperanza. Son los aguinaldos que más valen y no cuestan dinero. Demos amor, como decía San Juan de la Cruz: donde no hay amor pon amor, y sacarás amor.
Oración
Tú, Señor, quisiste compartir nuestras preocupaciones y nuestros sufrimientos, como hermano nuestro. Jesús migrante, acompáñanos. Te pedimos Señor, por tantos padres y madres de familia migrantes que pasarán esta Navidad lejos de sus hijos, Dales la fortaleza y la fe para vivir esta separación. Jesús migrante, acompáñanos También te pedimos por los jóvenes y niños que experimentan la soledad y falta de protección, lejos de sus padres. Dales la gracia de descubrir en su alma tu compañía y tus cuidados de Padre y Madre. Jesús migrante, acompáñanos Tú Señor, nos dices, en tu Palabra, que donde nosotros vayamos, allí estarás Tú acompañándonos y viviendo en medio de nosotros. Haz que esta certeza nos llene de optimismo y de seguridad.
Compromiso
Como familia y como comunidad, organizarnos para apoyar a las familias que viven en la calle. Se cierra la novena con algún villancico