Requisitos claves para abrir un negocio en Quito

Requisitos claves para abrir un negocio en Quito

Requisitos claves para abrir un negocio en Quito. En la capital, dos de cada tres locales no tienen permisos de funcionamiento. Aquí una guía para obtenerlos. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en el WhatsApp. Si usas Telegram  ingresa al siguiente enlace. 

 

Las sorpresas no son raras cuando alguien intenta un emprendimiento en Quito. Es común que esos entusiastas que buscan un negocio propio se encuentren con trámites engorrosos, tiempos inciertos, palabras y formularios indescifrables, ventanillas con gente amable, funcionarios apurados…

También hay quienes se apresuran a obtener el RUC y hasta invierten todo lo que tienen en sus respectivos negocios, pero que luego se dan contra la pared cuando quieren sacar la LUAE. En ese trámite se enteran de que ha habido un registro llamado ICUS y que su giro de negocio no está autorizado para el lugar donde se pensaba abrir las puertas.

“Esto nos pasa muy a menudo”, dice Henry Reyes, director Metropolitano de Servicios Ciudadanos, una dependencia del Municipio.

De acuerdo con el Directorio de Empresas del año 2020, elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), que es el último con datos oficiales, en Quito existen cerca de 190 mil empresas entre grandes, medianas, pequeñas y micro, lo que representan el 22 % del total de compañías del país y generan unas 900 mil plazas de trabajo.

Si bien los números son significativos, poner en funcionamiento un negocio en la capital, con todos los requisitos en regla, no es una tarea sencilla ni rápida.

Reyes explica que dependiendo del tipo de actividad económica y del cumplimiento de todos los procedimientos sin contratiempos, obtener los permisos en el Municipio y en instituciones gubernamentales podría demorar hasta tres meses:

  • Negocios de bajo riesgo (proceso simplificado), hasta 10 días hábiles; por ejemplo, tiendas de abarrotes que no vendan licor, o bazares.
  • Negocios de mediano riesgo (proceso ordinario), hasta 30 días hábiles; por ejemplo, restaurantes.
  • Negocios de alto riesgo (proceso especial), hasta dos o tres meses; por ejemplo, industrias, bares, discotecas, centros de tolerancia.

El vicepresidente de la Cámara de Industrias y Producción (CIP), Pablo Jiménez, señala que en Quito y resto del país hay dificultades en los tiempos para realizar los trámites, lo que se constituye como el principal problema.

Cita como referencia al indicador Doing Business del 2020, ranking elaborado por el Banco Mundial. En la medición sobre apertura de negocios, Ecuador ocupó el puesto 177 de un total de 190 países. De acuerdo con ese análisis, una persona puede demorar en promedio hasta 48,5 días en abrir su empresa en el país, cuando el promedio de América Latina y el Caribe es de 28,8 días.

 

Desconocimiento

Entre los mayores problemas para que los emprendimientos den sus primeros pasos rápidamente está el desconocimiento de los trámites a realizar.

Las iniciativas pueden tardar más en ser una realidad cuando no se sabe lo que se debe hacer, cómo y dónde, agrega Cristina Medina, propietaria de la firma Permisos Quito, que asesora a personas que quieren abrir un negocio, especialmente a pequeños emprendedores.

“Esto es muy frecuente. Por ejemplo, a veces las personas van directamente a los balcones de servicios (del Municipio) sin información previa y ahí se enteran que debían sacar un turno para recibir la atención o que el trámite que es por internet. A veces, tampoco saben en qué parte de la página web del Municipio pueden encontrar lo que necesitan. Este tipo de cosas hacen perder tiempo y generan confusión”, dice Medina.

Esto incluso puede provocar que en un momento dado los emprendedores desistan de continuar con el proceso, desmotivados por los múltiples trámites que se deben realizar y el tiempo que tardan en concretarse, añade la experta.

“Es que no hay claridad de qué no más hay que hacer. Todo es un enredo”, dice Gissela Rodríguez, que tuvo una experiencia desagradable cuando quiso abrir una panadería.

Buscó información en la página web del Municipio, pero las guías disponibles no le aclararon las dudas y cuando acudió a las ventanillas tampoco recibió la mejor orientación. Así que contrató a una persona para que se encargara de los trámites, pero después de meses de que Rodríguez le entregó dinero y documentos descubrió que no había avanzado con el proceso. Ella reclamó y obtuvo de vuelta sus recursos. Ahora, nuevamente intenta por su cuenta realizar las gestiones.

Diego Enríquez, propietario de un restaurante en el norte de Quito, cuenta que lo más difícil de conseguir para él fueron la LUAE y el permiso de la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa).

“No hay alguien que te diga qué tienes que hacer. Vas al Municipio y te dicen que se haga tal cosa, la haces y luego te dicen que te ha faltado otra cosa… No es un proceso ágil. Es bastante complicado. Por ejemplo, para el permiso de los Bomberos yo ya tenía todo listo, pero la persona que debía inspeccionar el local no iba, y los documentos caducan”, recuerda Enríquez.

 

Procedimiento y requisitos

Tras conversaciones sostenidas con la oficina de Servicios Ciudadanos del Municipio quiteño, con la representante de Permisos Quito y con información del portal de servicios municipales https://pam.quito.gob.ec/PAM/Inicio.aspx, este Diario hizo una lista de los requisitos locales que se deben cumplir para dar inicio a un negocio.

Hay tres componentes obligatorios para cualquier actividad económica en la capital: RUC, patente municipal y LUAE. Según el tipo de negocio es posible que se requieran permisos adicionales en instituciones gubernamentales; por ejemplo, los restaurantes tienen que contar con la aprobación de la Arcsa, es una dependencia del Ministerio de Salud.

 

RUC

Ya sea que se trate de una persona natural o jurídica, el requisito fundamental es contar con el Registro Único del Contribuyente (RUC), en el Servicio de Rentas Internas (SRI). Si se trata de una empresa, para obtener este registro antes se debe constituir la sociedad en la Superintendencia de Compañías.

En el RUC se deben describir todas las actividades económicas que se prevén realizar. Es importante que la información detallada sea precisa, a fin de evitar contratiempos posteriormente, cuando se gestione la patente municipal y la Licencia Única de Actividades Económicas (LUAE).

 

RAET – PATENTE

Una vez que se cuente con el RUC, lo siguiente es obtener el Registro de Actividades Económicas Tributarias (RAET) -también conocido como patente-, que es el pago de un tributo por ejercer o beneficiarse de la actividad económica dentro del Distrito Metropolitano, explica Reyes.

El trámite se hace por única vez de manera presencial, en los balcones de servicio del Municipio, ya que se requiere que el usuario firme el documento de solicitud. Para ello, hay que agendar una cita en el portal www.pam.quito.gob.ec o a través del Call Center 1-800 510 510.

El usuario debe entregar en ventanilla el original del RUC, un documento de identidad y un formulario que se descarga de la página web.

Dicho formulario se llena con la información de la persona interesada: correo electrónico donde se va a recibir las notificaciones, número de contacto, una planilla de servicios básicos para certificar la dirección exacta de la propiedad o el negocio.

Medina indica que este documento -y otros relacionados con el RAET- se aloja en la sección de Formularios, en el apartado de Gestión Tributaria.

Aquí es donde se generan algunos inconvenientes y confusiones, dice Medina, ya que comúnmente se conoce a este trámite patente y no como RAET. Además, la primera vez que se ingresa a la página web no se halla de manera directa un segmento que diga “Formulario RAET o Patente”, sino se accede por la pestaña de Gestión Tributaria.

Adicionalmente, se debe suscribir un acuerdo de uso de medios electrónicos, que también se encuentra en el portal de servicios.

 

Luego de que la persona interesada presente toda la documentación en ventanilla se abre el RAET y el Municipio otorgará una clave de usuario digital. Finalizado este proceso, los siguientes años el trámite de declaración y pago de la patente se hará de forma virtual.

Los valores a cancelar se calculan según el tipo de negocio. Reyes explica que en el primer año la tarifa es de $ 0, pero sí se debe hacer la declaración. Para el segundo año se pagará el 50 % del monto correspondiente y desde el tercer año de operaciones se cancelará el 100 %.

 

LUAE

La Licencia Única de Actividades Económicas (LUAE) es el permiso de funcionamiento que otorga el Municipio al desarrollo de actividades económicas en un establecimiento ubicado en el Distrito Metropolitano de Quito. Este permiso, que es un documento digital que tiene un código QR, se otorga mediante dos procesos: Emisión y Renovación.

Se gestiona en línea después de obtener la patente. En el portal de servicios municipales, en la sección LUAE Digital, se ingresa la misma clave de usuario del RAET y se realiza la solicitud inicial. Cada año hay la obligación de actualizar y renovar la información, y con eso se obtiene la renovación anual de la licencia.

La LUAE es un compendio de varias autorizaciones de distintas entidades municipales que se ejecutan dependiendo de lo que realiza cada negocio. El objetivo es verificar y asegurar que la actividad empresarial ofrece seguridad a su entorno, para los clientes y la comunidad, así como para los trabajadores.

El permiso de funcionamiento comprende varios aspectos a tener en cuenta. El principal es el Índice de Compatibilidad de Uso del Suelo (ICUS) que verifica qué tipo de actividades están permitidas o prohibidas, dependiendo del sector donde se ubique, o quiera ubicar, el negocio.

Esto también se puede consultar en el portal de servicios, en el apartado de Trámites más visitados. En la sección de Informe de Compatibilidad de Uso del Suelo se ingresa el número del predio y los datos de la actividad económica.

Medina aconseja a los usuarios revisar el ICUS incluso antes de abrir el RUC en el SRI, para tener claro el panorama de lo que se quiere y puede hacer. Así se evitarán inconvenientes posteriores que incluso pueden llevar a modificar el RUC porque no se ajusta a las necesidades. Si no se toma en cuenta esto, los trámites demorarán más tiempo, dice.

El director de Servicios Ciudadanos cuenta que en esta parte es donde más conflictos se generan.

 

Emisión de la LUAE según el tipo de actividad

Reyes explica que son tres categorías:

  • Negocios de bajo riesgo (proceso simplificado). La licencia se entrega de manera inmediata. Las inspecciones de las entidades, como los bomberos, se realizan aleatoriamente.
  • Negocios de mediano riesgo (proceso ordinario). La LUAE se otorga después de que se hayan aprobado las inspecciones técnicas de las diferentes entidades municipales.
  • Negocios de alto riesgo (proceso especial). El permiso también se entrega una vez superadas todas las revisiones correspondientes. Aquí intervienen instituciones del Gobierno central, según la actividad económica.

El director aclara que cuando los inspectores hacen la primera visita de control y encuentran incumplimientos, no niegan en ese momento el permiso, sino que hacen observaciones. Si en la segunda revisión no se ha cumplido, se da un tercer plazo; y si tampoco se cumple, entonces ahí sí se emite un informe negativo y el permiso de funcionamiento es negado.

Si se ha cumplido con todo hasta esta etapa, dice el funcionario, un establecimiento ya puede operar legalmente en Quito, sin que esto implique que existan otras autorizaciones a nivel gubernamental que se deban obtener; por ejemplo, los permisos de la Intendencia de Policía o de la ARCSA.

 

Subregistro y evasión

Hasta el 2019 el Municipio emitía un promedio de 70.000 LUAE al año; pero con la pandemia, en 2020, bajó a 48.000, señala Reyes. En 2021 se reactivó, pero aún se mantiene por debajo del nivel prepandemia. Durante todo ese año se otorgaron 62.701 licencias.

El director advierte que existe un importante nivel de evasión. Según cifras oficiales, las patentes que existen en el Municipio son alrededor de 250.000 patentes. “Se estima que, por cada tres negocios en Quito, uno tiene permiso de funcionamiento y dos no lo tienen”, anota Reyes.

En los Balcones de Servicios de las nueve Administraciones Zonales, desde el 04 de enero al 30 de diciembre de 2021, se inscribieron aproximadamente 23.455 RAET.

La patente deben obtener, obligatoriamente, todas las personas que ejercen actividades económicas en el DMQ. La LUAE solo corresponde a aquellas actividades que se ejerzan dentro de un local, que puede ser cerrado o abierto. Los servicios profesionales están excluidos de la LUAE, porque no necesitan de un espacio físico para su ejecución.

El subregistro y evasión al que se refiere Reyes se confirma en un informe del Banco Mundial (BM), que está recogido en una publicación de la iniciativa Quito Cómo Vamos, de diciembre de 2021, en la cual se destaca que una parte de la población realiza actividades económicas en un esquema de informalidad, porque no cumple con la normativa municipal como permisos, RUC, patente u otras causas.

El Banco Mundial detectó que el 53,5 % de negocios en el Distrito Metropolitano de Quito cuenta con patente, el 70 % tiene RUC y, además, solo el 25 % inscribe a sus empleados en el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS).

“Estos porcentajes alertan sobre la importancia del sector informal en la economía y la necesidad de atenderlo para incentivar la relación directa que se genera entre la formalidad, la rentabilidad y la productividad”, destaca el organismo multilateral en su informe.